miércoles, 6 de noviembre de 2013

Paziencia


Paziencia
(O la ciencia de la paz)

Cultivar
el arte de la espera.
Desconfiar
de todo lo que crece repentino y acelerado.
Recelar del vértigo y del atropello,
Guardarse de todo lo que apremia.
Visualizar los abismos y no precipitarse.
Subir progresivamente, caer retardadamente.
Respirar siempre a fuego lento.
Dormir sin prisa.
Caminar sin pausa.
No atolondrarse.
Decelerar las palabras,
deleitarse en los silencios.
Dilatar la felicidad,
acortar el ansia.
Masticar perezosamente
los besos: que haya tiempo para escupir antes de tragar.
No devorar al prójimo.
No abalanzarse sobre los lentos.
Observar que el río fluye y que todo pasa.
Perder el miedo a la muerte,
al fracaso, y a otras intemperies.
No suicidarse.
No lanzarse atolondradamente al vacío
sin haber tejido a conciencia una red libre de apuros,
una red sin compromisos.
Dejarse un espacio sin horas.
Pedirle al reloj que espere.
Utilizar más puntos que comas.
Separar los párrafos.
Dividir los capítulos.
Apartar una hoja en blanco al principio y al final.
Reservarse unos minutos para volver atrás.
Intercalar una jornada de reflexión en cada sueño.
Prever los imprevistos.
No tener prejuicios ni projuicios.
Conocer antes de juzgar.
Aprender antes de transmitir.
Pensar antes de actuar.
Respirar antes de pensar.
Mirar dos veces:
nada es lo que parece
a primera vista. “Las apariencias engañan.”
Fiarse de los proverbios.
Reírse ante los contratiempos.
Aceptar pazientemente cualquier acontecimiento.
Prepararse antes de rebelarse.
Serenarse antes de invadir
lo ajeno.
Nunca atacar por sorpresa.
Nunca atacar.
No declarar la guerra
sin antes haber intentado la paz(ciencia).

Nunca declarar
el amor urgente.