martes, 7 de enero de 2014

Manifiesto a favor de las plantas de interior


Manifiesto a favor de las plantas de interior
Las plantas se fuman mi oxígeno cuando duermo.
Tú también lo consumes cada noche y con más ansia,
y no por ello te destierro.
Todos, para sobrevivir, respiramos:
a mayor evolución, mayor daño.


lunes, 6 de enero de 2014

Manifestación de un 6 de enero

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Manifestación de un 6 de enero

Epifanía agreste y sin estrella,
procesión perpetua hasta tus brazos,
peregrinaje perenne hasta tus muslos.
Y allá, en tu Meca,
no hallé el paraíso (tampoco el infierno, seamos justos).
Aturdida y contrariada por la ausencia de magia,
arrojé mi corona por tierra en gesto de abdicación.
Cayeron los mitos de tantos pasos caminados
y sólo quedó la materia.
Dime qué más quieres de mí
si ya no soy etérea (ni tampoco niña),
pero transporto sabiduría y culpa a partes iguales.
Acéptame así, tan salvaje,
aparta tus libros sagrados
y aliméntame el alma con deseos 
de oro,
de incienso,
de mirra.

viernes, 3 de enero de 2014

Escritora de vidas

Empiezo el año poniendo en marcha este proyecto: 

Escritora de vidas

Este proyecto no consiste en ser biógrafa, sino en ser la escritora de tu vida. Escribir una biografía es algo que se entiende reservado a unos pocos privilegiados, aquellos cuya vida ha tenido una repercusión pública y que merece pasar a la posteridad; eso, o simplemente las vidas de aquellos cuyo pronóstico de venta asegura beneficios. Escritora de vidas es un proyecto mucho más modesto, de andar por casa, que se mueve más en el plano emocional que en el comercial.
¿Por qué tener que ser famoso para dejar constancia escrita de una vida? ¿Por qué tener que escribir una biografía y no simplemente recoger fragmentos de una vida, episodios que merecen permanecer, ser transmitidos, ser recordados?
Lo que propongo es recoger pedazos de pasado para, al escribirlos, hacerlos “eternos e imperecederos”, sustraerlos del olvido o incluso reinventarlos en la memoria e inmortalizarlos así, tal cual tú quieras contármelos. Te propongo que me hables de algún episodio de tu vida que te gustaría recordar con todo detalle, que te gustaría regalar a tu pareja, amigos, a tus hijos, o simplemente guardar para ti. Yo lo escucharé y lo transformaré en literatura. 

Más información aquí: Escritora de vidas

miércoles, 25 de diciembre de 2013

¡FELIZ (na)VIDA(d)!

"El hombre civilizado ha inventado la diligencia, pero ha perdido el uso de sus pies. Puede echar mano de muletas, pero le falta músculo. Tiene un magnífico reloj suizo, pero se le ha embotado la facultad de saber la hora por la posición del sol. También tiene una carta de navegación actualizada en Greenwich; y por eso, porque tiene a su alcance la información cuando la necesita, este hombre de la calle no reconoce ninguna estrella en el cielo. No ve el solsticio; poco más sabe del equinoccio (...) Tantos cuadernos de notas minan la memoria; las bibliotecas sobercargan el ingenio; las compañías de seguros hacen que aumente el número de siniestros; y quizá sea cuestión de plantearse si la maquinaria no acaba entorpeciéndonos; si no habremos perdido con el refinamiento algo de energía, algo del vigor de la virtud salvaje." 
Ralph Waldo Emerson.

miércoles, 18 de diciembre de 2013

Decisiones y/o


Decisiones y/o

Truco y/o trato.
Susto y/o acuerdo.
Plebiscito y/o secesión.
Revolución y/o cambio.
Renovarse y/o morir.
Nacer y/o (re)nacer para amar y/o odiar 
siempre y/o nunca
antes y/o después.
(Re)conciliarse y/o hacer el amor y/o la guerra.
Doble o nada.

Rencor y/o perdón.
Perdón y/u olvido.
Amnesia y/o amnistía.
Enterrar y/o desenterrar.
Desangrarse y/o cicatrizar.
Pensar y/o actuar.
Voy.
Sin miedo
a las decisiones imprevistas.
¿Realidad o magia? Realidad.
¿Confort o riesgo? Agallas.
¿Verdad, atrevimiento o pozo?
Beso. 
 

martes, 3 de diciembre de 2013

Te’n anaves lluny (o La dansa més trista)


TE’N ANAVES LLUNY (O LA DANSA MÉS TRISTA)

TE’N ANAVES LLUNY

Te’n anaves lluny,
més enllà de l’estiu,
més enllà de les esferes,
a les faveles,
més enllà de mi.
Jo et seguia amb la mirada oberta 
per si decidies entrar als meus ulls
per a habitar-hi.
Però volares en direcció contrària als meus braços.
I aleshores vaig interpretar
la dansa més trista.

Escoltava els ocells intermitents
escoltava un solo de piano i contrabaix
i tanmateix seguia sent un solo.
Escoltava el soroll del teu ventre
en les nits de lluna nova.

“Porta’m amb tu”
I tu no volies,
però sense voler ja em portaves.
Em portaves sota el mentó
darrere dels genolls,
al paladar.

M’havies respirat tantes voltes
que ja em portaves.

Els meus cabells, al teu melic;
els meus dits, a les teues parpelles.
Els llums apagats, les veus obscures.

És possible volar cap avall?
Quan comença el vol a ser caiguda?

Penses que viatges a soles
però mai no m’has expirat dels teus pulmons,
encara no m’has expulsat de la teua boca.
Continuo sent colonitzadora del teu cos,
continuo dormint en la platja de la teua esquena.

Em portaves
com a part del teu equipatge.
Però m’ofegava entre tants altres records
i vaig preferir extraviar-me
per a sentir-me única,
tot i que perduda.
Tot perquè t’adonasses que em portaves.
Sí, vaig preferir extraviar-me
perquè necessitava que em trobasses
a faltar.








LA DANSA MÉS TRISTA

Jo sóc la dansa més trista,
jo sóc la dona dels ulls foradats,
del reciclatge de llàgrimes inquietes,
com ho són els braços que ballen per a oblidar el buit.

El meu cos és un univers de notes;
la meua ànima una galàxia de silencis.
A crits volia parlar-te,
però la música m’impedia escoltar-te
i vaig emetre moviments d’auxili
per a demanar-te carícies desganades,
buscant un contacte afligit
que malgrat tot, és contacte.
Però jo era una dansa transparent.
Amb els ulls t’implore clemència
per a la dansa més trista.
Què menys que un final
ple d’aplaudiments.
 

Poema guayandor del 4º Certamen de Poesía Pedro Hernández Salinas, 
de l’Agrupació Rubinenca Cultural i Artística (ARCA, Barcelona)

Mujer, siempre conquistada





Mujer, siempre conquistada

Era bonita,
pero no le quedaban sueños en las ubres
y tuvo que ordeñarse las venas en busca de piedras
con las que construir murallas
para protegerse de los buscadores de oro;
déspotas que revuelven el cielo y la tierra.

Era bonita por dentro
y quería, con palabras, deshacer la hiedra
y reconciliar tu fe y la mía,
fusionar mezquitas con catedrales,
recitar oraciones ateas
con las que comulgarían
tu vientre y mis turbantes,
tus dagas y mis cruces,
tus rosarios y mis penas.

Era bonita y sin embargo,
no pudo evitar con sus doradas trenzas
que se derrumbaran las torres.
No pudo desescombrar los ideales ni las vidas aplastadas.
No pudo detener con su lengua pulcra
los malos entendidos.
No pudo resistir la tentación
de morder la manzana
sin envenenar también a Adán.
Blancanieves del paraíso,
¡danza con tus siete velos!
Recita cuentos prohibidos de libros censurados
con posturas de amantes que saludan al Sol.
¡Duerme, bella embalsamada!
Sacrifícate en rituales de sangre
y tiñe de rojo los ríos que transportan mesías.
Báñate con leche de burra
y tiñe de blanco los desiertos que ocultan profetas.
Sacrifícate en tu hogar y con tus hijos.
Harakiri con cuchillos de cocina,
harakiri con plumas de oficina.
Esclava, siempre esclava,
con cadenas de amor impuesto,
con consignas de buena mujer.
Rebélate y tiembla desde las entrañas.
Genera mareas de árboles,
huracanes de estrellas,
terremotos de hojas muertas.
Capaz de dar de comer con tus senos
a manadas despiertas de soles hambrientos.
Capaz de provocar con tus muslos tsunamis de fuego.
Madre Tierra,
cuidas hijos con cabeza de elefante
y has vencido la destrucción con tu sosiego.
Pero pronto rebrotarán las semillas y el cosmos,
volverán a nacer las flores y las malas hierbas;
de ti mamarán lobos y hombres hasta dejarte seca.
Rebélate
Madre, Tierra, Mujer,
siempre conquistada.



miércoles, 6 de noviembre de 2013

Paziencia


Paziencia
(O la ciencia de la paz)

Cultivar
el arte de la espera.
Desconfiar
de todo lo que crece repentino y acelerado.
Recelar del vértigo y del atropello,
Guardarse de todo lo que apremia.
Visualizar los abismos y no precipitarse.
Subir progresivamente, caer retardadamente.
Respirar siempre a fuego lento.
Dormir sin prisa.
Caminar sin pausa.
No atolondrarse.
Decelerar las palabras,
deleitarse en los silencios.
Dilatar la felicidad,
acortar el ansia.
Masticar perezosamente
los besos: que haya tiempo para escupir antes de tragar.
No devorar al prójimo.
No abalanzarse sobre los lentos.
Observar que el río fluye y que todo pasa.
Perder el miedo a la muerte,
al fracaso, y a otras intemperies.
No suicidarse.
No lanzarse atolondradamente al vacío
sin haber tejido a conciencia una red libre de apuros,
una red sin compromisos.
Dejarse un espacio sin horas.
Pedirle al reloj que espere.
Utilizar más puntos que comas.
Separar los párrafos.
Dividir los capítulos.
Apartar una hoja en blanco al principio y al final.
Reservarse unos minutos para volver atrás.
Intercalar una jornada de reflexión en cada sueño.
Prever los imprevistos.
No tener prejuicios ni projuicios.
Conocer antes de juzgar.
Aprender antes de transmitir.
Pensar antes de actuar.
Respirar antes de pensar.
Mirar dos veces:
nada es lo que parece
a primera vista. “Las apariencias engañan.”
Fiarse de los proverbios.
Reírse ante los contratiempos.
Aceptar pazientemente cualquier acontecimiento.
Prepararse antes de rebelarse.
Serenarse antes de invadir
lo ajeno.
Nunca atacar por sorpresa.
Nunca atacar.
No declarar la guerra
sin antes haber intentado la paz(ciencia).

Nunca declarar
el amor urgente.




jueves, 17 de octubre de 2013

El hombre que no sabía llorar

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El hombre que no sabía llorar

El hombre que no sabía llorar
sabía beber el llanto de los ojos ajenos,
acunar los sollozos, acallar los gemidos,
mecer los pálpitos,
mimar las lágrimas;
adormecer con nanas los espasmos.

Los afluentes de agua salada que transcurrían por las mejillas
desembocaban en un océano de cabellos
y se filtraban hacia un subsuelo de piel y otros desencantos.

El hombre
que anhelaba dulcificar los mares
se preguntaba qué tipo de líquido había dentro de sus cuencas
y se medía la temperatura del rostro
buscando glaciaciones y otras catástrofes
que le explicasen por qué, siendo de hielo,
tenía la mirada congelada,
pero el corazón caliente de besos.
y los labios ardientes de consuelo.
Con ellos cantaba “boys don’t cry”
y quería evitar riadas de duelo,
lagunas de angustia,
mareas de desamparo,
pero no sabía cómo provocar la sequía entre los párpados.
Quería aprender a llorar para combatir agua con agua.
Al no lograrlo, buscó
la empatía entre sus dedos,
y encontró en sus palmas la conexión con la tristeza.
El hombre que al tocar lloraba
apretaba cinturas hasta exprimir la pena.
El hombre de ojos sin lástima,
se lastimaba pensando que no sabía llorar
pero sí sabía que por él lloraban.

El hombre que no sabía llorar
(tampoco) supo sonreír
a tiempo.

viernes, 20 de septiembre de 2013

Suzanne

SUZANNE,  Leonard Cohen

Traducción propia.

Suzanne te lleva hasta su lugar cerca del río.
Puedes oír el ir y venir de los barcos,
puedes pasar la noche a su lado.
Y sabes que está medio loca,
pero por eso quieres estar ahí.
Y te da de comer té y naranjas
que han hecho un largo camino desde China.
Y justo cuando quieres decirle
que no tienes amor para darle
ella te envuelve en su arrullo
y deja que sea el río el que te responda
que siempre has sido su amante.
Y quieres viajar con ella,
y quieres viajar a ciegas
y sabes que confiará en ti
porque has tocado su cuerpo perfecto con tu mente.

Jesús fue un marinero
cuando caminó sobre las aguas.
Pasó largo tiempo observando
desde su solitaria torre de madera.
Cuando supo con certeza
que sólo aquellos que se ahogan podían verle
dijo: "que todos los hombres sean marineros
hasta que el mar los libere".
Pero él estaba roto
mucho antes de que el cielo estuviese abierto.
Abandonado, y casi humano
se hundió bajo tu sabiduría como una piedra.

Y quieres viajar con él,
y quieres viajar a ciegas
y piensas que tal vez, confiarás en él
porque ha tocado tu cuerpo perfecto con su mente.
Ahora Suzanne te coge de la mano
y te conduce hasta el río.
Lleva harapos y plumas
del mostrador del Ejército de la Salvación
Y el sol se derrama como la miel
sobre nuestra señora del puerto.
Ella te enseña dónde mirar
entre los desechos y las flores.
Hay héroes entre las algas,
hay niños en la mañana.
Se asoman buscando amor
y se asomarán así por siempre
mientras Suzanne sujete el espejo.

Y quieres viajar con ella,
y quieres viajar a ciegas
y sabes que puedes confiar en ella
porque ha tocado tu cuerpo perfecto con su mente.




Suzanne takes you down to her place near the river
You can hear the boats go by
You can spend the night beside her
And you know that she's half crazy
But that's why you want to be there
And she feeds you tea and oranges
That come all the way from China
And just when you mean to tell her
That you have no love to give her
Then she gets you on her wavelength
And she lets the river answer
That you've always been her lover

And you want to travel with her
And you want to travel blind
And you know that she will trust you
For you've touched her perfect body with your mind.

And Jesus was a sailor
When he walked upon the water
And he spent a long time watching
From his lonely wooden tower
And when he knew for certain
Only drowning men could see him
He said "All men will be sailors then
Until the sea shall free them"
But he himself was broken
Long before the sky would open
Forsaken, almost human
He sank beneath your wisdom like a stone

And you want to travel with him
And you want to travel blind
And you think maybe you'll trust him
For he's touched your perfect body with his mind.

Now Suzanne takes your hand
And she leads you to the river
She is wearing rags and feathers
From Salvation Army counters
And the sun pours down like honey
On our lady of the harbour
And she shows you where to look
Among the garbage and the flowers
There are heroes in the seaweed
There are children in the morning
They are leaning out for love
And they will lean that way forever
While Suzanne holds the mirror

And you want to travel with her
And you want to travel blind
And you know that you can trust her
For she's touched your perfect body with her mind.

Sunrise, Moonset

El otro día vi la película Moonrise Kingdom y pensé que en castellano ese concepto no tiene traducción. No hay "alunecer" ni "puesta de luna". Y es que propiamente hablando el moonrise y el moonset no existen, pues como bien dice Nathan, it just fades away. Pero aunque la luna ni rises up ni sets down, como concepto nos sirve igualmente. El "aparecer" y "desvanecer" de luna es menos evidente que el del sol, que siempre lo eclipsa.
Yo desde hace tiempo, quería verlo, y esta mañana lo he conseguido.
En la playa de El Saler, el sol se levantaba imponente, mientras la luna llena se desvanecía, discreta.

miércoles, 4 de septiembre de 2013

Algo sobre una visita a una parte de la India

He titulado la entrada "Algo sobre una visita a una parte de la India" para expresar que apenas conozco la India, que únicamente he visitado el Rajasthan y Varanasi y que he estado menos de un mes. Es decir, que no he vivido lo suficiente como para escribir algo fundamentado al respecto. Por ello, escribo sin conocimientos, pero con sentimientos, y esto son tres poemas que escribí estando allí:

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El niño que no quería caramelos

El niño que no quería caramelos
era un mendigo prematuro
de manos de araña,
 de pies de barro y ojos de cristal.
Solo su tamaño muestra su infancia desnuda,
su inocencia descalza.
El niño que no quería caramelos
se camufla de superhéroe usado
para llevarse unas rupias a la boca
y escupírselas a sus padres
como quien rumia una condena a no alimentarse nunca,
a tragarse el desdén y otras malarias,
 a toser los juegos que nunca tuvo,
 a columpiarse en la esperanza de unos billetes que no sabe leer.
El niño que no quería caramelos
ha aprendido a saborear las piedras,
a lamer angustias que no le pertenecen,
 a chuparse las penas.
Ha aprendido a codiciar las propiedades de vidas adultas.
El niño que no quería caramelos
frunce el ceño ante los ojos que se desvían con indiferencia forzada,
 los de aquellos que respiran aire acondicionado
de forma incondicional,
los que consumen sin condiciones,
 los que caminan con suelas que corren,
los que poseen relojes que nadan,
teléfonos que cantan,
 sueños que no duermen,
pantallas que contienen mundos que él nunca vera.
El niño que no quería caramelos
 fue capturado por un objetivo.
Solo así, petrificado en una imagen, podría parecer un niño.



La hija madre

La hija madre
transporta un hijo hermano.
Parece su muñeco, pero esta vivo.
Con el hambre no se juega.
"Llévate algo a la boca".

De haber nacido en otro sitio
la niña seria madre
de un bebe de plástico maquillado
y con llanto de fantasía. 
"No te lleves las piezas a la boca"

No podemos amamantar a vuestros hijos (dicen)
ni acostarlos en cunas con doseles junto a los nuestros.
No somos responsables de vuestros hijos (dicen)
pero tu has sudado la seda
que abriga mi cuello.

La hija madre
pasea a su no-hijo
con la fuerza de sus no-brazos.
por las ventanillas de los autos.
Ninguno les adopta,
ninguno les lleva lejos.
"Ou je suis n'est pas qui je suis" (dicen).

El niño de cabeza colgante
pronto (con suerte) podrá caminar
y tener mas hijos que colgar
de otros brazos.


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En India

País con venas de río
donde van a morir tus células:
vidas flotantes.
País de vacas santas
de animales-persona,
de personas-hormigas.
Reprodúcete y habla
entre pitidos constantes.
Reprodúcete y recorre
por carreteras locas,
distancias de inseguridad.
Yo no como animales: 
los animales me comen.
Los monos son vegetarianos,
piensan, confiadas, sus crías.
Los escarabajos tienen
los ojos enterrados en arena. 
Corazón que no siente.

Yo me remojo en el desierto la conciencia,
me despierto llena de estrellas,
me duermo con un té de alba y cardamomo
que me llena de calor los pensamientos.
¡Y cómo me pican tus niños
con su inocencia adiestrada!
¡Y cómo me intrigan tus damas
de hombros tapados
y vientre abierto!

India, ¿dónde estás, mujer?
¿detrás de qué mostrador?
¿desempeñando qué trabajo?
¿fregando con tus manos, qué suelo?
¿criando con tu leche, cuántos hijos?
¿escribiendo, que bien puedes, cuántos cuentos
de mil y una noches?
¿empuñando qué lanzas?
¿derritiéndote en qué bailes?
Mujer india de ojos pintados
y dientes pobres,
¡sonríe! Hasta que se te estire la piel.
O no sonrías. Y demuestra
que tus arrugas son más puras
que todos los templos.